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miércoles, 3 de noviembre de 2010

La sonrisa de Mona Lisa....


No, no voy a hablar de la película, aunque todo hay que decirlo, me gustó mucho cuando la vi (quizá sea el momento de volver a verla, algún día de estos). 

No, de lo que quiero hablar es de la Sonrisa, con mayúsculas, de esa sonrisa que lleva por el camino de la amargura a centenares de críticos desde el siglo XIX, que fue cuando comenzó a ser popularmente conocido este cuadro de Leonardo. Críticos o aburridos, diría yo más bien, ya que se pueden leer y oír las más disparatadas teorías sobre por qué sonreía la mujer del cuadro (sobre la que también se especula respecto a su identidad). La sonrisa puede apreciarse si miramos el cuadro de forma global, pero no si observamos directamente los labios. Ejemplos de hechos que pudieron causar esa sonrisa, haberlos haylos, y a montones, entre los cuales puedo poner: sonreía porque unos músicos amenizaban el trabajo del pintor, porque sufría dolor de muelas, que refleja amargura, incluso alguna afirmación más polémica, como la del filósofo esloveno Slavoj Zizek (que si alguien siente curiosidad, animo a buscar).

Por eso me ha parecido curioso este dibujo de Caloi , donde con sólo un dibujo consigue resumir todo este embrollo que acabo de contar: como vemos, aparece el cuadro de Leonardo pintado a falta de la sonrisa, que el propio Da Vinci está buscando en un ordenador, a ver cuál es la más enigmática de todas.

Al menos Caloi ha decidido no caer en dentro de una de esas hipótesis, al menos no en la que afirma que la Mona Lisa es un autorretrato del mismo Leonardo...

Dalayn

3 comentarios:

  1. ¡Como me he podido reir con la hipótesis de Slavoj Zizek! ¡realmente desternillante! jajajaja
    Muy graciosa :)
    De todas formas, el tema sobre la sonrisa de la Mona Lisa me parece muy interesante; sin embargo tampoco llego a entender porque debe haber una razón, un misterio o un enigma detrás de su sonrisa; quizá Leonardo quiso retratarla sonriendo, o simplemente la modelo quiso sonreir mientras la retrataba ¿A caso nosotros no sonreímos sin razón alguna cuando nos hacen una fotografía o la única razón es porque nos están haciendo la foto?
    De todas formas, me parece un cuadro realmente interesante y apasionante, al igual que su pintor.

    Artemaníaco.

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  2. Sí, yo también me he partido con la hipótesis de Zizek, pero no he querido ponerla para no "herir sensibilidades".

    A mí particularmente el cuadro me gusta mucho. Una vez un profesor mío fue al Louvre y se lo encontró no en la sala donde comúnmente estaba expuesto, sino en otro lugar (ahora mismo no recuerdo dónde), preparado para que lo llevaran a reparación (supongo que alguna sesión de estas de limpieza), y se tiró el hombre media hora dándole vueltas al cuadro tranquilamente, mientras que en la sala donde está tienes que ponerte de puntillas de la gente que suele haber alrededor.

    A mí me gustaría poder verlo. No es lo mismo que verlo en una foto o en internet que tal cual.

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  3. Todavía me estoy riendo... ¡¡Qué grande Zizek!! Lo importante, y reconozco que no es el cuadro de Leonardo que más me gusta, es que se ha seguido hablando de esa expresión durante muchísimo tiempo. Es una gran obra.

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