Día tras día, las marcas más importantes de ropa nos bombardean con campañas publicitarias que incitan al narcisismo, a la superficialidad, a la delgadez extrema; en definitiva, a acomplejarnos.
Por ello, cabe destacar aún más campañas como las de Benetton; campañas que desprenden un sentimiento de igualdad racial y de hermandad entre las diferentes razas y naciones. Sin embargo, aunque su labor es admirable, no puedo dejar de sentir que, como todas las monedas, sus campañas tienen una doble cara: No podemos olvidar que ante todo están promocionando una marca privada que se ve beneficiada por la polémica suscitada por las llamativas imágenes utilizadas(siempre acompañadas por el logotipo de marca) y por un mensaje que intenta apelar a la conciencia de los consumidores. ¿Acaso es lícito utilizar un problema social para aumentar "las ventas"?
A pesar de esta doble moral, personalmente sigo prefiriendo campañas como éstas a campañas que explotan las inseguridades(sobretodo de los más jóvenes, los más vulnerables) para promocionar sus "milagrosos" productos.
Artemaniaco.
A continuación, podéis ver diferentes ejemplos de campañas de Benetton:
La verdad es que no suelo prestar mucha atencion a las campañas publicitarias, aunque tal vez deberia, porque cuestiones como esta son interesantes.
ResponderEliminarYo también preferiría usar productos anunciados con campañas que se arriesgan y defienden una serie de valores morales, pero está claro que su intención es vender y captar la atención del posible comprador. (¿Todo vale?) Sin embargo, el hecho de que lo hagan de un modo sensible a los problemas de la sociedad, para mi es algo positivo.
Otra cuestión es hasta qué punto se pueden llevar ese tipo de campañas y si resultan efectivas o no. Creo que captan la atención de un comprador determinado que se preocupa por esos problemas, pero imagino que habrá gente a la que no le guste. Supongo que los creadores tendrán estos aspectos muy estudiados y habrán decidido que les interesa hacerlo así.
Hazel*